Una vasta trayectoria política y profesional tiene el correligionario Alberto Robles. Médico cirujano con especialidad en Urología, compatibilizó su carrera con la política destacándose en la Región de Atacama, lo que le llevó a representar al Partido Radical por 16 años como diputado. Elegido por sus pares en 2018 como Primer Vicepresidente Nacional del PR, tras la renuncia del co. Maldonado asume en noviembre de 2021 como Presidente Nacional. Actualmente va a la elección.

Conozcamos su visión del radicalismo y del país en sus propias palabras.

Nos gustaría agradecer su disposición para responder las preguntas de La Gaceta Radical. Para comenzar: Cuéntenos un poco de sus orígenes… ¿Cuáles fueron sus razones para militar en el Partido Radical?

Soy una persona nacida de una familia, yo diría de esfuerzo, de trabajo. Mis abuelos todos del sur, de la zona de la Araucanía. Una familia grandota de más de quince hijos en esa época. Mi abuelo, educado en una familia de campo, digamos de campesinos normales, estudió para profesor normalista, se casó con una señora que también estudio como una profesora. Son los padres de mi padre.

La familia de mi padre es de tres hijos, esto en Nueva Imperial, zona de la Araucanía. Mi padre se forma en un hogar de dos profesores y por lo tanto tiene la capacidad y posibilidad de lograr una educación en esa época, a mi juicio, bastante buena en el sur de Chile. Estudia en el liceo de Temuco y se establece como ingeniero. Mi madre, del sur de chile de Carahue, hija de un médico de la zona, nunca estudió mayormente, en esa época se casaban muy jóvenes… A mi me hicieron en Huasco, estaba trabajando mi padre… ferroviario de toda la vida, ingeniero de ferrocarriles. No obstante, yo nací en Santiago. En ese tiempo en Huasco no habían hospitales como para poder tener partos… Así que mis padres decidieron venirse a donde trabajaba mi abuelo, en el Hospital J.J. Aguirre, en Santiago.

Es decir pertenezco a una familia tradicional chilena, yo diría de clase media. Me formé desde el punto de vista educacional, en la educación pública. Particularmente en el Instituto Nacional donde desarrollé gran parte de mis estudios. De ahí salté a la Universidad de Chile, Facultad de Medicina. Atraído por el trabajo más bien con las personas, más que el trabajo burocrático de oficina, el trabajo directo con las personas que eso es lo que hacemos los médicos…

Soy una persona casada. En segundas nupcias, siete hijos entre los tuyos, los míos y los nuestros. Tengo una misión desde el punto de vista de la sociedad, inculcada por mis abuelos: laica. Uno de mis abuelos, socialista, el otro radical. Por lo tanto en las casas de mis abuelos se conversaba mucho de política, más que en la casa de mis padres. En ese sentido me desarrollé en un ambiente laico, con una amplia mirada humanista. Me tocó toco vivir gran parte de mi adolescencia en dictadura, por tanto tuve que desarrollar mi trabajo y crecimiento  político más bien en dictadura. Por lo tanto tuve que trabajar con las armas de la cultura en la época de la dictadura.

Cuando ya se acercaba la democracia, cuando digamos, estaba ya instalada la discusión democrática, y se autorizó la inscripción de los partidos políticos, yo tomé la decisión firme de incorporarme a la política, porque tenia muy claro que los cambios de la sociedad se hacen desde la política, no se hacen simplemente desde el trabajo personal. El trabajo médico es muy bonito, a mi me encanta… Soy un hombre agradecido de ejercer el trabajo que me gusta hacer, la medicina es un campo muy bonito, da muchas alegrías y satisfacciones: El hecho de poder tratar una persona y esa persona resuelve su problema de salud, sobre todo yo que soy especialista en urología, donde uno también trabaja desde el punto de vista de la cirugía, y uno resuelve los problemas de las personas con sus propias manos, ayuda a superar problemas importantes de las personas. Pero la política es más que eso… La política es a mi juicio, y esto es lo que pienso desde hace mucho tiempo, la actividad más hermosa y valiosa que puede realizar un ser humano. Particularmente porque desde la política se realizan todas las actividades que van al desarrollo de la sociedad. Con esto quiero decir que cuando uno es político tiene la opción desde el cargo político que ocupe de aportar fuertemente a las y los habitantes de una comunidad en el desarrollo de esa sociedad. Y por eso es que es tan importante la política.

En esa mirada, de mediante la política servir a la gente, es que cuando tomé la decisión de militar, me leí las doctrinas, los documentos de todos los partidos políticos, inclusive los de derecha, para saber que es lo que estaban planteando estos partidos para las sociedades que vivimos. Sentí que el partido que tenia los mejores principios, los que mas se ajustaban a mi forma de pensar con la sociedad era el Partido Radical. La doctrina del partido, es una de las más hermosas que uno puede revisar en términos de sociedad a la que puede aspirarse, y por eso decidí militar en el partido radical. Estoy contando en el año 87-88. La razón para militar en el partido fue principalmente esa: Ver como uno desde la política puede aportar para el trabajo y para mejorar la sociedad en la que vive.

¿Cuál ha sido su trayectoria política dentro de la militancia y fuera de ella? Por otro lado: ¿Cuál es la motivación para ser presidente del Partido Radical?

He tenido suerte en política, porque me gané el cargo de Jefe de Urología en el Hospital de Copiapó, yo era super joven… tenia 31-32 años. En esa época trabajaba al mismo tiempo en el Hospital Barros Luco, como urólogo; en la Universidad de Chile, dando clases como docente de anatomía en el Escuela de Medicina; así como en la posta del Hospital San Juan de Dios como Cirujano de Urgencia. Como imaginarás, estaba todo el día corriendo de un lado para el otro… Y se dio esa posibilidad de concursar a un cargo de Jefatura de Urología en Copiapó. En ese tiempo estaba con mi primera señora, ya con un hijo y otro que venía en camino, y le dije que era más racional hacer familia en regiones que en Santiago donde uno tenia que correr para todos lados. Así que decidí irme a Copiapó a ese cargo que me había ganado.

Cuando llegué allá se dieron varias circunstancias: la primera es que supe que era el único medico que militaba en un partido político, así que me tocó apoyar el trabajo por el NO, me tocó apoyar la campaña por el Presidente Aylwin, y bueno, rápidamente me incorporé a trabajos directivos en el partido. Todo fue muy rápido… el Presidente Aylwin me honró con el nombramiento de SEREMI de Salud de la Región de Atacama, me imagino por esto de que yo era el único medico en la región que militaba en un partido político en esa época.

También para delante fui desarrollando mi carrera política. Fui SEREMI durante cuatro años, Director del Servicio de Salud cerca de 6 a 8 años, Jefe del Servicio de Urología, y bueno, de todo lo anterior me fue conociendo mucha gente…

Desde el punto de vista de cargos políticos, hay que decir que la región de Atacama es bien política. En esa época el partido tenia una buena cantidad de militantes particularmente en Copiapó. Uno de mis correligionarios Miguel Guerrero, fue candidato al Parlamento en el 90, y me puse a disposición de la campaña. Más adelante los correligionarios me pidieron que postulara a la directiva regional, en donde fui electo tesorero en esa primera oportunidad. Nos hicimos cargo de tener el arriendo de una sede durante los dos años que fui tesorero. Eso en el contexto de que cuando uno es SEREMI, así como Director del Servicio, y el hecho de que éramos pocos los urólogos: dos en toda la región, por lo que a menudo me tocaba intervenir, y hacer cirugía a mucha gente. Yo operé muchísimo.

Los directivos teníamos posibilidades de desarrollar nuestra carrera directiva, hacíamos gestión, pero también operábamos como médicos. Nunca dejé de desarrollar mi trabajo hospitalario, público, operando a mucha gente, a muchos copiapinos, vallenarinos… Viendo mucho paciente, imagínate que éramos tan sólo dos urólogos en toda la región… Así que tenia que dividirme y organizarme bien en todas esas tareas, esas cargas laborales, y francamente siento que lo hice bastante bien, porque nunca tuvimos problema. Teníamos muy buen trabajo con mi colega urólogo allá.

Con todos esos vínculos políticos y profesionales, de ahí mi gran salto fue postular a la Cámara de Diputados, por el distrito 6, de Vallenar, Alto de Carmen, Freirina, Huasco, Caldera y Tierra Amarilla. Saqué la segunda mayoría, y doblamos con mi compañero de lista de ese momento. De ahí fui diputado por 4 periodos.

En el partido, siempre fui dirigente regional hasta que fui electo diputado. Presidente Regional, miembro de la Directiva Nacional. Me jacto de haber estado en todos los Consejos Nacionales desde el 90 a la fecha. Soy el único radical que he estado en absolutamente todos los Consejos Nacionales desde el 90 a la fecha. Al principio como Consejero Regional, Presidente Regional pero siempre fui Consejero Nacional. Después en calidad de parlamentario también parte del Consejo Nacional, y finalmente estos últimos años por estar en la mesa nacional. Lo digo con bastante orgullo que he hecho una carrera desde la base militante, pasando por prácticamente todos los cargos que existen en el partido.

En el parlamento, estuve 16 años. Perdí la elección a senador a manos de nuestra ex candidata presidencial Yasna Provoste, ella tenia una gran ascendiente, así que la verdad es que se veía venir. Yo realmente creo que ahí cometí el error de ser candidato al Senado pudiendo haber sido candidato a la Cámara, pero siempre sentí que en el Senado estaba el poder real en esta democracia, mientras no se vote esta nueva constitución… Es el Senado donde se desarrolla el poder real en este país.

Respecto a la actual candidatura, creo que hoy en día el partido está en un momento muy critico desde el punto de vista de su posición política. Estuvimos a punto, pero verdaderamente a punto, de no cumplir con el mínimo de parlamentarios requeridos para ser partido legal. Y eso hace que, evidentemente, que todos tengamos que estar dispuestos a colaborar para poder desarrollar un trabajo hacia el interior del partido, de garantizar que vamos a salir adelante. Y por eso siento que uno no puede restarse. Varios correligionarios me pidieron que encabezara el trabajo, considerando un contexto que como sabes tu, Carlos Maldonado renunció en un momento muy particular, y me tocó a mi de un minuto a otro asumir la presidencia y continuar adelante. Me han pedido que continúe el proceso de cambios que le estamos dando al partido, un proceso en el que creo totalmente y siento que eso es lo que me ha impulsado a ser candidato. No tengo ninguna aspiración personal, a tal punto que ya he dicho en todos lados que no voy a ser nuevamente candidato al parlamento, ya fui parlamentario durante 16 años, no voy a ser candidato a ningún cargo de este tipo. Por tanto puedo concentrar mis energías en trabajar al interior del partido, y sobre todo porque tengo suficiente experiencia para aportar en lo que viene.

Tengo la capacidad para hacer esa transición partidaria, aportar desde mi experiencia, que es más que las de otras personas. Como un comentario aparte, siempre he sentido que el Presidente del Partido debería ser un parlamentario, ya que es desde el parlamento donde se hace el trabajo político nacional, pero eso no ha ocurrido, entonces el liderazgo del partido y el liderazgo parlamentario no necesariamente confluyen en el modelo partidario actual, y siento que eso podría mejorarse.

Cuéntenos sus principales ejes programáticos.

Hay varias y muchas cosas que hacer en el partido. Lo más importante y relevante es volcar al partido para que vuelva a tener esa voluntad de tener poder. De lograr obtener el poder.

El partido hace algún tiempo ya dejo de tener esa vocación de poder, y cuando uno pierde esa vocación de poder se queda en lo que es, no tiene intención de avanzar. A mi me parece que las demás listas siento que se quedan en eso, en meramente ingeniar formulas del como administrar lo que tenemos. Pero no es sólo eso, sino esa vocación de poder, una vocación de crecer, de ganar, de tener poder para que nuestros principios tengan fuerza para realizar cambios en la sociedad, cuando se hable de la fraternidad, la igualdad, la libertad, esta mirada humanista de la política, donde el ser humano debe ser el centro del desarrollo político, son las miradas que diría que tienen que pesar en la sociedad. Y hay muchos que se quieren quedar con nuestras banderas. Hay otros partidos que ahora están postulando lo mismo que hemos postulado nosotros de toda la vida.

Creo que el Partido Radical debe ser capaz de propender a tener esa mirada de buscar el poder para lograr cambios en la sociedad en beneficio de la sociedad toda, en una mirada de valores que nosotros reflejamos.

 

En ese sentido para poder obtener desarrollo y poder veo varias cosas que deben hacerse, el trabajo de nuestra lista, apunta en general a 3 macro ejes:

  • Planificación político administrativa: Desde ya, no dejar las cosas a la improvisación, sino planificar desde el punto de vista electoral, cuales van a ser nuestras alianzas, si las vamos a tener o vamos a ir solos en las municipales, como vamos a reencantar tantas personas para ser candidatos, como trabajamos el punto de vista del desarrollo político del partido planificadamente, para tener evaluaciones de como vamos avanzando. Tener controles del punto de vista de las metas que uno se debe poner cuando planifica. Tener control de gestión, un equipo que controle las distintas aristas cuando se van desarrollando. La planificación me parece extraordinariamente importante. Cuando uno planifica hace un montón de cosas que tienen que ver con la administración, planifica los recursos, el uso de los recursos, como se deben desarrollar, como se deben cautelar… La planificación incorpora un montón de variables de la administración. Una de las cosas que encuentro mas valiosa, es que nuestra lista, el candidato a la Tesorería Nacional, mas que tesorería, lo que hemos conversado con Alejandro (Cabrera) es una gestión del punto de vista de la dirección de la administración global del partido. Más que un Tesorero, es un administrador, que tiene que ser capaz de ordenar el partido administrativamente, financieramente, y gestionar cosas para poder tener una base de desarrollo de modernización.
  • Fortalecimiento de la militancia, en específicamente en el trabajo de Mujeres y Jóvenes. Voy a dar un particular énfasis, no solo para ingresar mujeres al partido y establecer una ruta de posibilidades para su desarrollo político, sino que también hacer un énfasis en el apoyo y fortalecimiento de la Juventud Radical, particularmente en el ámbito universitario estudiantil que nos parece relevante incorporar a toda esta dinámica. Darle a las juventudes la posibilidad e intencionalidad de obtener el poder para cambiar la sociedad. Me gustaría establecer como objetivo partidario que en las próximas elecciones municipales en cada comuna del paisa vaya al menos un joven como candidato. De ir construyendo un camino, que quizás no se gana a la primera, pero se crean vínculos territoriales, un trabajo orgánico que abre nuevas oportunidades antes desconocidas. Dentro de este ítem, es primordial establecer bases formativas claras en lo doctrinario, en las formas de hacer política, capacitaciones para toda la militancia pero especialmente orientadas al fortalecimiento de mujeres y jóvenes.
  • Profundo cambio estructural: Este es un partido extraordinariamente presidencialista. La cultura interna está acostumbrada a que el presidente haga de todo. Yo te digo que uno de mis grandes problemas ahora último en la gestión de Carlos, sin olvidar la de los otros presidentes, es que son extraordinariamente presidencialistas. Nos ha tocado en este ultimo tiempo, también estar en la línea metódica, tener que tomar decisiones que deberían ser colectivas, y efectivamente debemos cambiar esta cultura presidencialista, para hacerla mucho más horizontal, más participativa, y eso implica un profundo cambios de estatuto, en todos los niveles del partido, para incentivar la participación. A mi me parece que los regionales deberían estar compuestos por a lo menos un miembro de cada comuna. Tal vez si orientáramos el trabajo pensando más en los distritos más que en las regiones. Distritalmente pensando en una mirada de trabajo electoral, para en vez de tener 16 regiones, tener 24 distritos, cada distrito con su presidente distrital, formado por cada comuna del distrito, todas con participación en el consejo distrital. Estoy convencido que hoy ya cambió la forma de hacer política con las nuevas tecnologías, perfectamente podemos hacer una democracia interna participativa. Como presidente del partido, trasmitiré por streaming las reuniones del CEN, con el objeto de que se puedan mirar, retroalimentar, comentar, e inmediatamente tener un debate, respecto de lo que dicen y hacen cada uno de los elementos de la directiva, y que todo eso lleve a la fortalecimiento de la participación del partido. Yo por ejemplo veo de repente veo en Whatsapp, opiniones algunas informadas y otras absolutamente desinformadas, y veo que el problema es que debe haber una forma oficial e igualitaria de acceso a la información, para que el debate sea con elementos de la realidad y no caer en el fenómeno de las fake news. De estas lógicas de la mera representación hay que pasar a la participación, y por ello: Estatuto Nuevo. De ahí hay que discutirlo, revisarlo, proteger a las minorías, creo que el sistema electoral que tenemos es malo, no va en las lógicas de equipo sino de personalidades individuales. Debemos estudiar modelos, y ver cual es el que acomoda más al trabajo futuro del partido. Que por ejemplo, entendiendo que en una elección interna, quienes compiten son radicales, que valoremos las lógicas de la integración, que las distintas miradas en el partido formen parte del desarrollo institucional. Eso de quedarse exclusivamente con la mayoría electoral resta aportes valiosos de correligionarios. Por ejemplo veo muy valiosa la intervención programatica de Andrés Sepúlveda, me parece muy interesante lo que dice Itayreé (Acle), el Leo (Cubillos) ha estado en el partido tantos años, conoce muy bien todos los temas administrativos del partido, extraordinariamente trabajador y colaborador. Por tanto, perder a toda esa gente atendiendo exclusivamente a una lógica electoral, me parece poco sano para el interés superior del partido.

¿Cuál es su opinión respecto de la Convención ideológica del PR?

Necesitamos generar una mirada doctrinaria clara, un relato común que nos permita alzar la voz sin estar discutiendo siempre que el partido “es para acá es para allá”, y por eso una Convención.

Particularmente una Convención Programática. Programatica más que Ideológica, por que los ideales del partido son bastante claros, y uno se puede mover por las orillas del radicalismo sin tanto problema, pero lo importante es que uno no se salga de esas orillas del radicalismo y eso me parece claro. Yo he escuchado de repente en algunos lados que hay que tener “Convención Ideológica”… La ideología del partido es clara. De repente me asusta porque hay algunos que quieren cambiarle la ideología al Partido. Cambiar la ideología del partido significa dejar de ser el Partido Radical, y hay muchos otros partidos que se quieren quedar con nuestra ideología. Eso lo digo a quienes se sienten orgullosamente radicales. Para aquellos que tienen una visión en esencia ideológicamente distinta, no esta mal recordarles que están en un mal domicilio político, por lo que a mi me parece que siempre es bueno interiorizarse en nuestro desarrollo ideológico.

Dicho eso, lo que en este punto se necesita, lo que más bien corresponde y en lo que estamos muy al debe es en el aspecto programático. Tener una Convención Nacional con un énfasis programático fuerte, de la que emanen programas claros de cara a la ciudadanía, que permitan al radicalismo permear en la población, sobre todo en áreas tan actuales como la identidad digital, todo lo que tiene que ver con las tecnologías de la información, la protección de los datos de las personas, la robótica en el trabajo y como va a cambiar el mundo por esto, los temas ambientales… El partido debe tener muy clara su visión en estas materias, el punto de vista económico. El partido siempre ha tenido una mirada económica que prioriza al ser humano por sobre los bienes. Lo que no quita que creemos en la industrialización, en la empresa, en el desarrollo productivo, y que no se atemoriza de decir que un mercado correctamente regulado tiene un valioso aporte que dar por lo que hay que apoyar decididamente a las empresas. Lo que no significa que no queramos avanzar con igualdad y justicia social, de respetar al ser humano en su dignidad.

¿Cuál es su postura frente al gobierno de Gabriel Boric, y por otra parte, sobre la Convención Constitucional? ¿Estará con el apruebo?

Partamos por la Convención que es más fácil. El partido debe decidir colectivamente una decisión.

He escuchado con el paso de las semanas voces en el Partido que ya están trabajando por el Apruebo porque consideran que cualquier cosa que aparezca debe ser aprobada, otros que “por ningún motivo”, “que hay cosas demasiado serias como para aprobar” por lo tanto se inclinan por el Rechazo. Yo creo firmemente que esta decisión debe ser de partido, tomada de forma colectiva. Y por eso una vez termine la elección interna el 2 de julio, a la semana siguiente, ya con la propuesta final de la constitución en mano citaré a todos para tomar esta decisión colectiva. Es decir, vamos a tener un debate del que saldrá una decisión firme y argumentada del Partido Radical, donde aprobaremos o rechazaremos el proyecto, entendiendo y asumiendo las implicancias. Si me apuras, personalmente pienso que hay que aprobar. He sufrido los rigores de la Constitución del 80, en el parlamento topamos muchas veces cuando queríamos hacer cambios, creo que debemos tener una nueva constitución.

Obviamente tengo algunas diferencias con el borrador, en particular siento que hay puntos que se alejan de la lógica integradora del “Chile de Todos”. Por ejemplo, pienso como humanista que el ser humano es uno, que no pueden existir diferencias por sexo, orientación, etnia, origen, etcétera, ya que somos uno… Por lo tanto para esa misma humanidad: un mismo sistema de justicia. Que podamos mejorarlo, cambiarlo, lo que se estime conveniente, me parece bien. Guardar la correcta separación de poderes de una democracia, que se controlen entre ellos, para que ningún poder pueda opacar a los otros y robarse la democracia. La defensa de la democracia es uno de los elementos más importantes de una constitución. Hay cosas que no me gustan tanto, pero creo que se pueden limar asperezas y se pueden ir cambiando después, y en ese sentido, creo que es mucho mejor el proceso de cambios en el nuevo proyecto de constitución que en la de 1980.

Con respecto al gobierno de Boric, debemos apoyarlo, le debe ir bien. Es un gobierno transformador que quiere hacer cambios reales, pero que la tiene muy difícil. El parlamento esta dividido en mitades, particularmente el Senado. Hay muchas cosas que no se podrán hacer de frentón, eso hay que entenderlo, pero hay que administrar bien lo que se tiene. A través del gobierno, hay que demostrar eficiencia, ser muy empático con la gente. Porque si eso no es así, el péndulo se irá de este lado al otro con mucha fuerza, llegando incluso al sector de los republicanos, Kast, y eso me preocupa mucho para el futuro de nuestro país. Por eso es importante apoyar al gobierno.

Desde el equipo de La Gaceta Radical agradecemos nuevamente su tiempo. Para cerrar, le invitamos ahora a dar un mensaje a las correligionarias y correligionarios.

Tal vez como un mensaje a todas las correligionarias y correligionarios a través de La Gaceta Radical, decirles sobre todo como este es un medio con origen en la Juventud Radical, de las juventudes de nuestro país… decirles que la política es hermosa. La política es el arte de llevarle a la gente, las personas, como familia, como seres humanos, las capacidades para su desarrollo en la plenitud de sus potencialidades innatas. Eso es a lo que debe apuntar el radicalismo a través de la política. Por tanto quiero invitarles a incorporarse a la política. A ver la política como un medio para servir a la gente, para trabajar. Cuando tengamos buenos políticos, la política será buena. Si le dejamos la política a las personas que ven en ella una forma de hacer y ganarse la vida, o dicho de forma más explicita, una forma de obtener poder para beneficiarse a ellos mismos, entonces le estamos entregando la política a esas personas que no le harán bien a la sociedad. Eso significa que las personas con valores deben incorporarse a la política. Tal vez mi mensaje es ese. Mas que un mensaje electoral, porque yo entiendo que las elecciones internas, son todas elecciones donde nos conocemos, sabemos como se mueven los “acarreos”, y los distintos planteamientos que se hacen en cada comuna y sectores para lograr obtener apoyos para dirigentes que más o menos concuerdan con su mirada. Frente a eso, siento que el mensaje más relevante que puedo dar, es que ojalá que las juventudes se incorporen cada vez más,  hombres y mujeres a hacer política sana pensando en el futuro de nuestro país, nuestra sociedad y nuestra gente.

 

Las opiniones vertidas son de exclusiva responsabilidad de quienes las emiten y no representan necesariamente el pensamiento de La Gaceta Radical

Esteban Kuhlmann Matus

Por Esteban Kuhlmann Matus

Administrador Público, Politólogo, Docente Universidad del Biobío. Vicepresidente COPPPAL Juvenil, Ex Presidente Nacional de la Juventud Radical de Chile.

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